Aunque ya pasó el tiempo en el que la discusión estaba en su momento álgido, el problema del déficit fiscal estadounidense aún sigue siendo importante pues a la hora de la verdad no se solucionó nada. Y es que el arreglo al que llegaron demócratas y republicanos no es lo que se dice magnífico. Nada más veamos el recorte en el gasto federal que se pactó para el periodo 2012-2021:
A largo plazo ese recorte tendrá prácticamente un efecto nulo sobre la economía. Probablemente se deberán tomar otras medidas tales como una regla fiscal más sencilla y ambiciosa que las reglas fiscales que se han impuesto con anterioridad. Tal vez como las que rigen actualmente el presupuesto de Chile y Suecia y que han tenido tan buenos resultados. Quien lo diría, Suecia, el paraíso socialdemocrata, tiene un especial cuidado a la hora de mantener la estabilidad fiscal, tratando en lo posible de mantener a raya el gasto y de no lesionar al sector privado. Tanto así que los impuestos corporativos máximos son menores que en Estados Unidos (26.3% vs 35% ver aquí y aquí)...
Saludos
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